EL CARABOBEÑO
Los recientes apagones que se producen en la ciudad de Puerto Cabello, generan gastos extras a los propietarios e inquilinos de los locales comerciales, al verse obligados a comprar plantas eléctricas, y así evitar el deterioro de alimentos y mantener en buen nivel sus ventas.
Alce Jovanel, dueño desde hace siete años de una tienda de ropa ubicadao en el casco central de Puerto Cabello, narró que hace tres años compró una planta eléctrica en ocho mil bolívares aproximadamente. Últimamente debe usarla con mucha frecuencia, y a consecuencia de encenderla constantemente debe realizarle mantenimiento cada dos meses, con un costo de Bs. 500. El precio actual de estos equipos está entre los tres mil 500 bolívares y BS. 135 mil, dependiendo de cuanta energía deba producir.
La única fuente de ingreso de José García, es el trabajo que realiza desde hace 10 años en su negocio familiar, situado en la calle Urdaneta del municipio porteño. Trabaja con su hijo Jhonatan, es propietario de un foto estudio, no posee planta que le genere electricidad para trabajar con las cámaras fotográficas, reflectores y computadoras. «Generalmente cuando se va la luz, debemos esperar que se restablezca el servicio, cuando se demora en llegar cerramos el día sin devengar ganancia alguna», apuntó Jhonatan García.