EL UNIVERSAL
Aseguran que el país tiene múltiples oportunidades con el gas natural.
Venezuela acumula reservas de gas equivalentes a 195 billones de pies cúbicos (abreviados como TCF por las siglas en inglés de trillions cubic feet), que la ubican como el sexto país del mundo por el volumen de sus reservas de gas, de acuerdo con los datos oficiales de Petróleos de Venezuela.
Pero los proyectos gasíferos Costa Afuera han sufrido considerables retrasos durante varios años, que han impedido que mejore el suministro del mercado interno, o que la República aprovechara un boom de precios del gas que ya pasó.
Sin embargo, las oportunidades para Venezuela en materia gasífera siguen vigentes considera el ex presidente de la Asociación Venezolana de Procesadores de Gas (AVPG), Luis Alberto Terrero, quien expresó que «hay que apostar al gas natural. Las necesidades de gas en la Faja del Orinoco o en las plantas termoeléctricas te indican que el mercado está ahí. Y el día que cubramos nuestro déficit interno, el consumo de la Faja; y esté resuelto el problema eléctrico, entonces iremos al mercado pensando que tenemos un excedente de gas y en cómo estará el mercado (internacional). Y ahí te fijarás estrategias en función de eso».
Venezuela a través del Plan Siembra Petrolera tiene previsto invertir 55 mil millones de dólares entre 2012 y 2018 para desarrollar proyectos de gas en yacimientos Costa Afuera, así como de gas en tierra.
Actualmente se producen unos 7 mil millones de pies cúbicos diarios, y la meta prevista es producir 12 mil millones de pies cúbicos diarios.
Para Terrero «en Venezuela lo que debemos hacer es intentar elevar nuestra producción, reemplazar plantas obsoletas y permitir una inversión que venga e instale una infraestructura, y sentarse con los hacedores a fijar metas especificas. Explotar el gas es una vía para mejorar la calidad de vida de las personas, tener mejores autopistas, mejor sistema eléctrico, mejores sistema de salud».
Destaca que las inversiones planificadas por Pdvsa pueden convertirse en herramienta para el crecimiento. «Si se invertirán 55 mil millones de dólares en gas natural en los próximos 5 o 7 años y aumentarás la producción, eso producirá cierta riqueza y empleo; y y se traducirá en bienestar social», indicó el ejecutivo.
¿Y el gas no convencional?
Los grandes mercados energéticos globales ven como se recomponen las estrategias frente al avance del shale gas o gas de esquisto (también conocido como no convencional), dándose el caso de que Estados Unidos puede convertirse en un exportador de gas en el mediano plazo, pese a las críticas ambientales a la explotación del shale gas, o sus altos costos de extracción.
El ex presidente de la AVPG indica que «el tema de los costos o los escollos con el shale gas no son importantes para Venezuela. Tenemos grandes reservas de gas asociado y no asociado, y lo que hay que hacer es extraerlo y monetizarlo. Y como somos un país que no exporta gas en este momento, no hay problema».
Explica que a Venezuela el precio del mercado no le afecta porque «no exportamos gas. Y creo que Pdvsa está dedicando sus esfuerzos a lograr el abastecimiento del mercado local, que en el caso de las plantas termoeléctricas es algo dramático».
