EL UNIVERSAL
Corpoelec instaló dos torres de emergencia en Monagas
Estaciones de servicio colapsadas, comercios trabajando a media máquina, panaderías y charcuterías con pérdidas millonarias al no poder refrigerar sus productos, son parte de los problemas que se producen en las distintas zonas de Maturín debido a la avería generada tras la caída de 8 torres de transmisión eléctrica en la zona de Río Tigre, al sur de Monagas la pasada semana.
Ayer se cumplió la suspensión de clases en las escuelas y no se reanudarán hasta que no se restituya el servicio eléctrico.
Cuadrillas de Corpoelec ensamblaron e instalaron ayer dos torres de emergencia, las cuales permitirán recuperar y energizar la línea 2 (Palital-El Furrial), y avanzar en la normalización del servicio en Maturín, informó la estatal.
A pesar de los avances, vecinos de la zona industrial protestaron en la tarde del lunes luego de que se volvieran a quedar sin servicio eléctrico.
La población tampoco cuenta con agua, debido a que las bombas se mueven con electricidad, teniendo que sortear la contingencia con camiones cisternas o con botellones de agua, que cada vez resultan más costosos.
Los comerciantes reportan que ante la ausencia de electricidad decidieron bajar sus santamarías para evitar la acción del hampa y proteger sus bienes y a sus trabajadores.