EL NACIONAL
Habitantes de Las Tunitas y Arrecife señalan que el polvo que emana de la planta de generación termoeléctrica causa problemas de salud
Residentes de Las Tunitas y Arrecife reclaman la intervención de las autoridades locales y del Ministerio de la Ambiente por la persistente contaminación que emana de la planta de generación termoeléctrica Josefa Joaquina Sánchez, conocida como Tacoa.
Ernesto Gamardo, vecino de Las Tunitas, señaló que a diario se ven obligados a mantenerse encerrados por el polvillo que se acumula en los techos y entra en las casas por las ventanas. “Todas las mañanas vemos cómo el hollín que entra en las viviendas forma una capa negra sobre todos los objetos”, dijo.
Los habitantes de la zona están aquejados de enfermedades respiratorias y conjuntivitis, en especial ancianos y niños. Garmardo señala que, en su caso, en varias oportunidades ha terminado en el hospitalito de Catia La Mar, por los problemas asmáticos de su hijo, de 10 años de edad.
“Muchos niños padecen conjuntivitis. Mi hijo de un año de edad tiene más de una semana con infección en los ojos”, apuntó Yusmari Canelón, otra vecina. La comunidad presume que la irregularidad ocurre por la mala calidad del combustible que se usa en Tacoa.