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La organización que preside, juntamente con Petróleos de Venezuela (Pdvsa), están dándose a la tarea de instalar 9.000 megavatios (MW) entre los Andes, la zona Zulia-Falcón, el centro y el oriente del país.
Así lo informó el presidente de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), Argenis Chávez.
«Estamos instalando un nuevo Guri, pero ahora disperso en todo el país», expresó el titular de la corporación, Argenis Chávez.
Las inversiones destinadas a las obras suman unos 20.000 millones de dólares. Sin embargo, la cabeza de Corpoelec no dio detalles entorno al tiempo de instalación de esa capacidad, ni si los recursos apalancan parte de los planes iniciales o se trata solamente de nuevos megavatios.
El gobierno del presidente Hugo Chávez Frías, ha intentado estabilizar un deteriorado Sistema Eléctrico Nacional (SEN), que pese a haber dado señales de deterioro, mucho antes de la crisis eléctrica de 2009-2010, no hubo mayores desembolsos, y la atención se concentró en la estatización del sector y su legislación.
Analistas críticos de la gestión de los responsables del quehacer eléctrico, sostienen que uno de los peores errores cometidos fue mantener las tarifas del sector congeladas, así como estatizar el servicio.
Caracas, la bella
Sobre la Gran Caracas y los ataques de que ha sido objeto en vista a que está enfrentando problemas eléctricos, el titular de Corpoelec sostuvo que existe autonomía de capacidad instalada, resultado de la ampliación de la generación eléctrica de Tacoa, en el estado Vargas, y de las plantas de Generación de Respuesta Rápida Guarenas, generación eléctrica La Raisa, Charallave, José María España, en Los Teques y La Mariposa, sector Las Mayas, todas ubicadas en el estado Miranda.
Según el despacho de prensa de AVN, Chávez señaló que con la activación de unidades en estas plantas eléctricas la generación de servicio en el Distrito Capital es de 2.560 MW y Caracas tiene una demanda de 2.500 megavatios, «es decir, hemos independizado a Caracas de la generación del sur (del país)».
Argenis Chávez hace alusión al tema de la Gran Caracas, toda vez que expertos han asegurado que la zona está enfrentando severos problemas de cortes eléctricos inesperados, al punto que han tenido que importar energía proveniente del Guri.
El alto funcionario de la eléctrica también informó que en la región los Andes adelantan el proyecto El Vigía, con 470 MW; en el estado Barinas se están instalando 100 MW; 1.237 megavatios en el estado Táchira. «Estamos en la ingeniería conceptual del proyecto», expresó.
Señala el despacho de la agencia del Estado que «el presidente de Corpoelec comentó que en la Central Hidroeléctrica Fabricio Ojeda, ubicada en el estado Mérida, para finales de diciembre se planea poner en funcionamiento la primera unidad generadora, y en febrero la segunda: «Son 500 megavatios que se van a instalar al SEN».
«La obra forma parte del Proyecto Hidroeléctrico Uribante-Caparo y tiene por objetivo abastecer tanto a la región andina del país, conformada por los estados Táchira, Mérida y Trujillo, como a Barinas y Apure».
Asimismo, comentó que existe un proyecto más ambicioso en Uribante-Caparo, de 1.237 MW, para un plazo de cuatro a cinco años, cuyos trabajos estiman comenzar el próximo año.
Sobre la planta termoeléctrica Antonio José de Sucre, detalló que generará 1.100 MW para alimentar a los estados Sucre, Monagas y a la isla de Margarita.
Pdvsa está instalando 2.000 megavatios en el país para autoabastecerse de energía eléctrica y desconectarse del sistema eléctrico nacional.
Demanda cubierta
Según Chávez, Venezuela cuenta con una capacidad instalada de generación de 20.200 megavatios, y existe una demanda de 17.800 MW. «Eso le da garantía al pueblo venezolano de que tenemos generación suficiente en el país para no tener los bloques de racionamiento», dijo.
Elecciones blindadas
El presidente de Corpoelec reiteró también que «está garantizado el suministro eléctrico en todas las regiones del país», para este domingo de elecciones.
De acuerdo con los cálculos de Chávez, el día de los comicios se espera una demanda eléctrica en torno a 16.800 MW, lo que presagia un día de bajo consumo.
En esto coincide el analista y ex funcionario del sector eléctrico Miguel Lara, quien sostiene que tradicionalmente los días de elecciones el consumo es bajo.
De acuerdo con la opinión de Lara, este es uno de los motivos por los cuales el sistema no debería tener inconvenientes, y de haberlos podrían ser problemas menores que no afectarán al proceso.
Pero de haberlo, comenta que las máquinas de votación están perfectamente dotadas de pilas cuya duración oscila entre 8 y 9 horas.
