EL NACIONAL
Corpoelec señaló que las fallas ocurridas en Sucre entre lunes y martes se debieron a insuficiencias menores
Las fallas de luz en el municipio Sucre afectaron varios sectores de la capital ayer en la madrugada. El déficit del servicio eléctrico se sintió por los constantes bajones de luz que duraron entre 30 minutos y hasta 4 horas.
Corpoelec reportó la normalización de la subestación Manzanares luego de la ruptura del cable, pero sectores alimentados por esta línea presentaron ayer muchas fallas de energía.
En Santa Catalina la luz se fue y vino como cuatro veces durante el día, situación que se repitió en el Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá.
Los centros privados de salud también sufrieron apagones; en la clínica Figuera se quedaron sin servicio a las 10:00 am.
El Banco Mercantil dejó de atender a su clientela por media hora por la falta de luz.
Durante un recorrido por la capital se constató que no hubo energía eléctrica, al menos, entre media y cuatro horas en la urbanización Terrazas Cumanesas, Parcelamiento Miranda, avenida Gran Mariscal donde funcionan un mercado, centros clínicos y bancos, así como en la Fundación Mendoza, sector Las Pepitonas, en Caigüire, en Brasil Sur, en la calle Ayacucho, Bolívar, Bebedero, avenida El Islote donde funciona el Mercado Municipal de Cumaná y en Las Cuatro Esquinas.
El día del apagón, el lunes en la noche, varias personas acudieron a los hoteles y posadas de la ciudad que tenían servicio eléctrico para pasar la noche. Otros optaron por irse a dormir a casa de familiares y algunos durmieron en plena calle, dijo Iván Malavé, habitante de Fundación Mendoza.
Nueva Esparta.
La empresa Corpoelec anunció que debido al incremento de la temperatura y la alta demanda del servicio eléctrico, vienen instrumentando un plan de racionamiento o de «administración de la carga» en algunos sectores de la isla de Margarita.
Dicho plan establece la restricción energética por espacio de una hora y media aproximadamente en los 10 municipios que integran la isla de Margarita, después del mediodía y hasta después de la medianoche.
Argumentan que con esa medida buscan proteger la operatividad de las unidades generadoras y garantizar el servicio a la población.
Iván Ramón Medina, residente del casco central de Porlamar, criticó que generalmente aplican racionamiento entre 2:30 y 4:00 pm, sin tomar en cuenta que no solamente afectan al ciudadano común, sino también a las operaciones del puerto libre, hoteles, restaurantes y todos los negocios establecidos en el municipio Mariño.