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Se han entregado más de 500 millones de dólares para repuestos, ampliación del muelle de Palúa y para el dragado del canal de navegación del río Orinoco.
Ferrominera Orinoco es de las empresas de Guayana que ha recibido más aportes procedentes del Fondo Chino Venezolano, contribuciones que -además- se han materializado en obras.
Hasta ahora, se ha aprobado un poco más de $1.832 millones, de los que ya han recibido alrededor de $ 582 millones para adquisición de insumos y proyectos de infraestructura. La información la dio a conocer Radwan Sabbagh, presidente de Ferrominera Orinoco (FMO).
-¿Cuál es la meta de producción de Ferrominera Orinoco para este año?
El objetivo del año pasado fue de 18 millones de toneladas de mineral de hierro y para este 2013 se ubica por encima de esta cifra porque ahora contamos con los repuestos que tanto necesitábamos para incrementar la producción en las minas.
-¿A cuánto asciende el aporte del Fondo Chino a la empresa?
Ya hemos recibido $200 millones para la compra de repuestos a través de Wisco; $162 millones para la ampliación y modernización del muelle de Palúa; así como $220 millones más para el dragado del canal de navegación del río Orinoco, que en estos momentos está en 45 pies, su diseño original, profundidad que se alcanza por primera vez en 30 años.
Agrega que también se aprobaron alrededor de $ 550 millones para la rehabilitación de la vía de ferrocarril y su posterior ampliación. Se trata de un poco más de 220 kilómetros.
Admite el funcionario que nunca se había hecho una intervención de este calibre en las líneas férreas de Ferrominera Orinoco, pues anteriormente se hacían parches.
Aclara que la empresa que se va a encargar de esa rehabilitación ha hecho 70% de las vías férreas en China.
Sabbagh también refirió que este año se inicia la construcción de la segunda línea de la Planta de Pellas, así como el mejoramiento de la primera.
El presupuesto estimado alcanza $ 700 millones y permitirá elevar la producción de pellas de tres millones de toneladas anuales a seis millones de toneladas. Se estima que la obra tenga una duración de tres años.
Precisa, asimismo, que la segunda línea estará ubicada al lado de la localidad donde solía estar la antigua Topca.
El presidente de Ferrominera Orinoco reconoce que en Venezuela hay un déficit en la oferta de pellas. Solamente las producen Sidor y FMO y en esta última siempre se importó el insumo, razón por la cual se hace necesaria la ejecución de la segunda línea de producción.
Utilidades con préstamos
Al consultar a Sabbagh sobre el flujo de caja de la empresa, señaló que en 2012 hubo que pedir un préstamo para cancelar las utilidades, pero en 2011 Ferrominera Orinoco canceló estas obligaciones con sus propios recursos.
Admitió que la crisis de 2008 golpeó a la compañía porque bajaron los pedidos de los clientes internacionales, pero aclaró que el suministro de mineral para el exterior está garantizado.
-¿Cómo está el flujo de caja de la compañía?
Nuestros problemas de caja se complican porque las empresas básicas están retrasadas en sus pagos. Por ejemplo, la deuda que tiene Sidor con Ferrominera supera la cifra de 1,6 millones de bolívares y, si se suma la de las briqueteras, la cifra alcanza los dos millones de bolívares.
Asegura que de lograr cobrar esos recursos, la empresa tendría asegurada la nómina por más de un año.
-¿Es cierto que deben gas, electricidad y el Seguro Social?
Sí, hemos hecho ya convenios de pago con la electricidad, con las empresas de gas y con el Seguro Social y el Banavih. Lo que siempre hemos pagado con regularidad es la nómina, pero tenemos pendientes otros gastos.
Se insiste en Guayana que el vicepresidente de la República, Nicolás Maduro, solicitó la renuncia a todos los presidentes de las empresas básicas, incluyendo al jefe de la CVG.
Eso ha puesto nerviosos a los sectores del chavismo que hacen vida en Ciudad Guayana, en el ámbito de las básicas, donde la corriente del Frente Bolivariano de Trabajadores (FBT), que dirige el gobernador del estado, Francisco Rangel Gómez, tiene la mayoría.
Hasta ahora, no hay nada oficial, solamente rumores, pero el nerviosismo está presente en las gerencias de las industrias.