CORREO DEL CARONÍ
Personal de Corpoelec recurre a otros trabajos para poder “sobrevivir”.
A la vocera del Frente Antiimperialista del estado Bolívar y trabajadora de Corpoelec, Yarisma Bogarín, le preocupa la poca atención que han recibido los trabajadores de la industria en el plan de 100 días expuesto por el ministro de Energía Eléctrica, Jesse Chacón.
Si bien reconocen que hay esfuerzos por recuperar el parque eléctrico, señaló que los trabajadores quieren saber cuándo se les cancelará los pasivos laborales.
Bogarín denunció que, entre otros pasivos, no se les está cancelando la totalidad de las horas extras a los trabajadores pues, según la gerencia, lo devengado por encima de 40 mil bolívares por ese concepto va dirigido a un fondo común que los trabajadores desconocen.
A propósito de la poca eficiencia denunciada por el secretario general de Sintraedelca, Alexander Arcia, la empleada pidió a Chacón que se revisen todas las comisiones de servicio.
De acuerdo con Bogarín, el sindicato tiene más de 500 trabajadores en comisión de servicio que ni fueron electos ni desempeñan labor sindical. “Queremos que los incorporen a todos”, dijo.
Además de las horas extras, denunció que se presta un mal servicio de comedor, no se cancelan las prestaciones sociales, es interrumpido el seguro de salud y no se están entregando a tiempo los implementos de seguridad.
Bogarín exigió a Chacón que se explique por qué si el jefe de la Central Hidroeléctrica Manuel Piar en Tocoma fue destituido, aún sigue cobrando.
“Nos preocupa que los trabajadores somos el motor de la empresa, que un líder debe tomar en cuenta a su recurso humano y que hasta ahora no se haya reunido con las bases”, dijo.
El delegado de Fetraelec, Luis Sánchez, cuestionó que el ministerio esté “echando a un lado la mano de obra calificada en la industria” y que los trabajadores, por el vencimiento del contrato, tengan otros trabajos alternos para poder “sobrevivir”.
Entre los pasivos, recordó la deuda de los tres 8 por ciento que aún se la adeudan a los trabajadores sin que haya fecha de pago. “Hay trabajadores que se han muerto esperando sus prestaciones sociales”, criticó.