Fallas eléctricas en el Metro de Caracas se han duplicado en un año

EL NACIONAL

 

Las caídas de tensión han pasado de una cada mes durante 2016 a una cada dos semanas, según registros de la ONG Familia Metro. Calculan que los problemas se intensificarán


El lunes alrededor de las 5:00 pm una falla de energía entre las estaciones Chacaíto y Altamira impidió el normal funcionamiento del Metro de Caracas en dirección a Palo Verde. Con esta suman dos problemas eléctricos en las primeras cuatro semanas del año.

Debido al percance cientos de usuarios debieron culminar el recorrido en transporte superficial, aunque la mayoría prefirió hacerlo a pie luego de la  orden desalojo que la gerencia del subterráneo instruyó en los primeros minutos de la contingencia. El servicio fue reactivado plenamente después de más de dos horas de retraso.

Ricardo Sansone, presidente de la ONG Familia Metro, explicó que las fallas eléctricas se han intensificado respecto del año pasado. Según el registro de la organización que dirige han pasado de una mensual en 2016 a una cada dos semanas en 2017.

“Las fallas ocurren a diario, aunque no todas con tan graves como la del lunes. Las caídas de tensión se evidencian en las constantes paradas que realiza el sistema en los andenes de las estaciones sin justificación aparente. Es irregular que un tren esté estacionado dos o tres minutos, que se baje la luz o el aire acondicionado, o que el sistema se paralice por largo tiempo”, señaló.

Sansone indicó que, a causa de la insuficiencia en el suministro eléctrico en el país, hay una gran probabilidad de que las fallas continúen durante el año y se intensificarán durante el periodo de sequía próximo a iniciar.

“Todas las condiciones están dadas; seguimos dependiendo solo del Guri y de Tocoma, pero el primero no está rehabilitado y Tocoma no está completamente equipado”, agregó.

Descontrol generalizado

El también ex inspector de operaciones del Metro atribuyó a la falta de un plan de seguridad el constante robo de cables en el tren de cercanía Caracas-Valles del Tuy, que también el lunes dejó varados toda la mañana a pasajeros de la zona, eventualidad para la que el Ministerio de Transporte habilitó buses del Sitssa.

“Esta situación revela la fragilidad del sistema de protección, son 42 kilómetros de vía a la intemperie. No hay un plan de seguridad coherente sostenido en el tiempo”, aseveró.

Otra irregularidad es que el martes en la mañana fue localizado entre las estaciones El Valle y La Bandera de la Línea 3 el cadáver de Oswar Bustamante, de 23 años de edad, quien fue reportado como desaparecido desde el miércoles 1° de febrero. El joven viajaba entre vagones y cayó a la vía férrea entre túneles, pero su hallazgo fue seis días después, según las primeras indagaciones policiales sobre el caso.

La saturación del sistema, falta de inspección y los largos lapsos de espera son las principales causas que, de acuerdo con Sansone, facilitan la incidencia de estos hechos.

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