DIARIO LA MAÑANA (FALCÓN)
Los manifestantes señalaron estar cansados de padecer constantemente por la escasez de agua y las fallas eléctricas. Durante una hora, se formaron inmensas colas en ambos sentidos de la vía
Tal como viene ocurriendo en diversas partes del estado Falcón, los habitantes de Guamacho y otros sectores del municipio Píritu ayer trancaron el paso por la carretera Morón-Coro. Por espacio de una hora (desde las 10:30 hasta las 11:30 a. m.), se formaron inmensas colas en ambos sentidos de la vía nacional.
Los manifestantes exigieron la solución inmediata a los graves problemas que confrontan, fundamentalmente lo concerniente a la distribución de agua y el caos eléctrico.
En medio de la llamarada por el fuego de los cauchos encendidos, Yenny Soto dijo que se cansaron de padecer constantemente por la carencia de agua y las interrupciones eléctricas. “Hay poblados que pasan hasta 15 días o un mes sin agua.
Los caseríos de San José de la Costa no cuentan con electricidad desde el domingo pasado. Quién no sufre así”, se preguntó. Aclaró que no se trata de “guarimba” y estaban conscientes de la incomodidad que generaban cerrando la vía, “pero no nos queda de otra para que nos atiendan”, exclamó la manifestante.
Por su parte, Yanel Rúa emitió duras críticas contra las autoridades. “No es posible que Píritu, un municipio donde reside familia del presidente Maduro, esté sumergido en el olvido”. Se solidarizó con los habitantes de los caseríos rurales por “tantos males que los azotan”, reiterando el caso del agua, la vialidad y la electricidad.
Frandi Lugo e Imad Abutoug dijeron que no es posible atender a tantas comunidades con tan solo dos camiones cisternas. Personal de la E.B. “Guamacho” se acercó para denunciar el robo de ventanas cometido contra la institución.
Una habitante de “Piedra Lucia”, Sara Colmenares, quien manifestó ser propietaria de una unidad cisterna, denunció que el funcionario de la alcaldía de Píritu Juan Escalona impedía que el transporte se abasteciera de agua en el embalse “El Corozo”. “Con esa actitud, impide que nosotros podamos llevar agua a sectores sedientos y sostener a mi familia”.
Al lugar de la revuelta, asistieron efectivos de Polifalcón, quienes mediaron para que los protestantes levantaran el cierre y se comprometieron a gestionar con las autoridades ejecutivas parte de la solución a las exigencias. Al abrirse el paso en la vía nacional, llegó uno de los cisternas con agua a Guamacho.