EL PITAZO
José Aguilar | El Pitazo
El pasado 4 de mayo el señor Maduro, en visita al Zulia, prometió dos plantas de 1.000 MW cada una para el Zulia: una a carbón en La Guajira y otra en la zona sur de Maracaibo en base a diesel. Ya yo sabía de este culebrón…
Transcurría el mes de marzo de 2015 y un reportero de medios financieros de Colombia me contactó desde la China, donde en ese momento él era corresponsal y me indicó lo siguiente: Sinohydro to tap Venezuela coal, build power plant
Con fecha 4 de marzo de 2015, se reporta desde Caracas un gran negocio para empresa China, Sinohydro, sin experiencia en la minería al momento. Se le pagaría cerca de US$ 2 mil millones para hacer la Ingeniería, Procura y Construcción (actividad para la que sí tiene trayectoria) por una Planta Turbo Vapor de 1.000 MW, utilizando el carbón del Guasare, ubicado en La Guajira, al norte del estado Zulia.
Pero el gran negoción es que por 30 años la empresa China adquiere los derechos de extracción, producción y exportación de 36 millones de toneladas métricas por año (MTMPA). El Zulia tiene reservas de 9 mil millones de toneladas métricas de carbón.
La explotación tendría lugar en cinco áreas de las municipalidades de Mara y Guajira, en un área de 255 Km², dando autoridad plenipotenciaria “para ejercer cualquier actividad que se tenga que llevar a cabo para la exploración y producción.” Adicionalmente, la mina cielo abierto debe extraer para la planta de 1.000 MW 3,37 MTMPA, con lo cual la extracción anual sería de 39,37 MTMPA.
Sí el carbón fuera oro, que no lo es desde el punto de vista ambiental para la generación eléctrica, por lo contaminante de sus emisiones de gases con efecto invernadero, Venezuela, con este arreglo con la empresa China, estaría cambiando oro y recibiendo barro.
La nación estaría entregando una riqueza valuada en más de 70 mil millones de dólares, mientras que Venezuela recibiría sólo el 8,6 % del beneficio y tendría que pagar por la planta eléctrica. Este negociado se ha venido cocinando desde tiempos del señor Arias Cárdenas, hoy ex gobernador de la entidad. Se le debe meter la lupa y los microscopios a fondo, por lo desfavorable desde el punto de vista financiero. Como se dice en el argot popular, es un negocio “vendepatria”.
Pero analicemos más a fondo los ofrecimientos demagógicos:
1) Una planta de carbón, con tecnología turbo vapor de 1 mil MW es muy compleja para la presente Corpoelec, que ha sido un rotundo fracaso. De 5.000 MW instalados en el país de este tipo de plantas, solo funciona el 0,7 %.
2) Las plantas de carbón a nivel mundial van de salida.
3) Una planta de 1.000 MW cerca del complejo Termozulia, en base a gasoil o diésel, es una aberración más. Requiere 30 mil barriles de diesel diarios adicionales que sería imposible suministrar con la actual PDVSA, aun teniendo las refinerías al 100 %.
4) Esto es pura demagogia por el festín electorero y se estrella contra el desempeño de la nota del 2015, ya que la planta de carbón debería estar en funcionamiento entre 2018 y 2019.
5) Peor todavía, en solamente tres ciclos combinados para la entidad zuliana, TZII, TZIII, Bachaquero, el PSUV acumula 8 mil 809 días de rezago y sobre costos en más de US$ 4 mil millones con 530 MW inconclusos, que por la corrupción, ahora requieren más endeudamiento para terminarlos. Viendo la infografía siguiente, un observador casual podría decir: señor Maduro, por favor cuénteme una de vaqueros…
De alarmante preocupación es la entrega del 90 % de la riqueza del carbón nacional a esta inexperta empresa, sobre todo desde el punto de vista ambiental, y estamos hablando de que esa área es donde se encuentran las cabeceras y cuencas de los ríos Socuy y Guasare, de vital importancia para el suministro de agua potable para la ciudad de Maracaibo.
Ya el Lago de Maracaibo es una vergüenza ambiental. En manos del régimen, este otorgamiento a la empresa china tiene todas las de formar un ecocidio de consecuencias inadmisibles.
Por último, la ética es indispensable. Hacer esto de espaldas a la nación, por un grupito de vivos a los que no les importa la próxima generación, sino solamente sus bolsillos, es inaceptable. La infografía muestra los elevados costos de las plantas de la empresa China, con fuertes lazos con Rafael Ramírez. Este nuevo negocio es insensato y amenaza con ser el mayor acto de corrupción contra la nación por la vía eléctrica. Debe ser parado y carbonizado. Es mejor hacer mantenimiento.
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