El Pitazo
El ingeniero Miguel Lara, quien estuvo a cargo del Sistema Interconectado Nacional hasta 2004, explica que los bajones en el servicio eléctrico ocurren por el estado de indisponibilidad en que ha quedado el equipamiento que permite regular los voltajes. Asegura que el escaso que aún se mantiene funcionando no es suficiente para minimizar estas fluctuaciones
Nataly Angulo
Las fluctuaciones de voltaje en el servicio eléctrico se perciben a diario. Las luces de los bombillos parpadean, los equipos electrodomésticos se apagan y los reguladores de voltaje varían de color. Cuando eso ocurre, los protectores de voltajes apagan automáticamente los equipos, y si no, los usuarios corren a desconectarlos para evitar daños.
¿Por qué ocurren los bajones? El ingeniero Miguel Lara, quien hasta mediados del 2004 se ocupó de la Oficina de Operación y Planificación del Sistema Interconectado del país, explicó que se deben al deterioro generalizado de la infraestructura eléctrica. «El equipamiento que contribuye al control de voltajes en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) también se ha venido quedando indisponible y el escaso que aún se mantiene funcionando no es suficiente para minimizar estas fluctuaciones», indicó en entrevista telefónica con El Pitazo.
Este martes 1° de septiembre se registraron al menos tres variaciones en el voltaje entre la 1:07 pm y 1:15 pm en Mérida, Apure y Guanare, según constataron los corresponsales de El Pitazo. En el caso de la capital andina, el impacto se registró incluso en los circuitos considerados como prioritarios. En Guanare, la fluctuación fue más severa en los circuitos de 220 v que en los de 110 v. Del caso de Apure no se precisaron mayores detalles.
El ingeniero Lara explicó que la indisponibilidad del equipamiento que sirve para controlar las tensiones es cada vez más acentuada y eso hace que las perturbaciones en el Sistema Eléctrico Nacional tengan efectos mayores y se sientan en más regiones por estar todas ellas interconectadas. “Lo que pasa es que todo el SEN está operando en condiciones inseguras y riesgosas y por ello muchas perturbaciones terminan afectando más allá de lo esperado a más áreas del SEN», destacó la fuente.
Alertó que entre las condiciones inseguras y riesgosas con las que se opera el sistema eléctrico venezolano, está la decisión de las autoridades de Corpoelec de operar el SEN en condiciones que frecuentemente exceden los límites de transmisión de energía para evitar profundizar los racionamientos. «Por el estado de deterioro al cual han llevado el SEN, la opción de exceder los límites disminuye racionamientos, pero aumenta el riesgo de apagones», afirmó.
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