DIARIO EL CARABOBEÑO
Trabajadores de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) abrieron cuatro almacenes de materiales y equipos en Carabobo, donde permanecen desde 2010 diferentes refacciones necesarias para optimizar el servicio de energía eléctrica en el país.
En los depósitos situados en Planta Centro, Carabobo-Los Guayos, El Bosque y Michelena, permanecen almacenados 11 mil 976 medidores trifásicos, conectores bimetálicos de todas las medidas, cortacorrientes, codos y copas.
En el de Los Guayos hay cinco mil transformadores de 25, 37, 50 y 75 Kilo Voltios Amperios (KVA), mientras que en los almacenes de El Bosque hay una cifra igual de medidores trifásicos, cintas aislantes, conductores ensamblados, carretes de cable diversos, brecker y bombillo. “Materiales que se llenan de polvo y humedad mientras la nómina eléctrica es acusada de sabotaje para enmascarar la negligente gestión”, alertó Oswaldo Salcedo, miembro de Fuerza Renovadora.
Salcedo aseguró que la denuncia es una demostración del descontento en la nómina por las acusaciones que los señala como autores materiales de actos de sabotaje en instalaciones estratégicas como Planta Centro.
A través de una carta enviada al presidente de la estatal eléctrica, Argenis Chávez, los miembros del Movimiento Renovador Eléctrico solicitaron una auditoría urgente a los almacenes y la actualización del Sistema Automatizado y Programado de Repuestos y Materiales en Almacén.
En el comunicado, el grupo exige la destitución de Juan Polanco, miembro del Estado Mayor Eléctrico, en representación del poder obrero y Reinaldo Correa, Subcomisionado de Comercialización en Carabobo. Ángel Navas, presidente de la Federación Nacional Eléctrica (Fetraelec) también fue señalado.
El grupo repudió la permanencia en almacenes de un enorme lote de uniformes especiales que requiere unos estándares especiales para aislar la corriente del cuerpo, mientras que los 44 mil trabajadores de Corpoelec llevan cerca de cuatro años sin dotación. “Lo más grave es que durante ese tiempo, los compañeros se ven obligados a financiar las botas, que actualmente están en el orden de los dos mil 500 bolívares. Lo mismo sucede con los cauchos, herramientas y hasta la gasolina para los vehículos”.
Esta plancha, aspirante a dirigir el sindicato eléctrico, prometió que a partir del 5 de abril todo cambiará con la designación de un liderazgo dispuesto a luchar por los derechos de la nómina eléctrica, respetando los acuerdos internacionales y la contratación y trato justo para la nómina criolla.
