DIARIO LA VERDAD (ZULIA)
Alixel Cabrera / Maracaibo / noticias@laverdad.com
La cantidad de megavatios fuera de servicio por las acciones vandálicas sólo significaría seis por ciento de la potencia racionada en las provincias de Venezuela
El ingeniero José Aguilar, consultor internacional de energía eléctrica afirma que el déficit que dejaron los 13 casos de “sabotaje” que presentó este mes Luis Motta Domínguez, ministro de Energía Eléctrica, representa apenas 0,7 por ciento del suministro eléctrico. La cantidad de megavatios fuera de servicio por las acciones vandálicas sólo significarían seis por ciento de la potencia racionada en las provincias de Venezuela.
Para Aguilar, un acto de sabotaje incluiría tres elementos: conocimiento, premeditación y acceso con intencionalidad de lograr causar y consumar daños. Considera que muchos de los actos mostrados por el ministro no reúnen estas condiciones.
En las declaraciones sólo se evidenció un máximo de 200 megavatios en las primeras 48 horas del caso de la explosión del transformador en la subestación de El Corozo en Táchira. La cifra luego se redujo a 100 megavatios por el resto de la duración del evento.
Esto, en términos de energía -señala el experto- afectó en promedio 2,4 gigavatios hora (GWh) diarios de los 370 (GWh) que se manejan diariamente en el país. Es decir, que sólo representa 0,7 por ciento del suministro diario de Venezuela. “El déficit pudo haber sido contrarrestado con la importación desde Colombia a los dos días de la falla”.
Esta cantidad de megavatios sólo representa seis por ciento de la potencia racionada en el país. “Hay más mar de fondo que el supuesto sabotaje alegado sin mostrar los recaudos de rigor para estos casos, de manera que no explica la gran cantidad de fallas, cortes, racionamientos que se experimentan a diario en el país”.
Aguilar condenó que se hicieran públicas las imágenes del hombre electrocutado al intentar alterar el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) en Dabajuro, estado Falcón. “En el plano técnico lo más aberrante es mostrar una línea de servicio residencial para indicar que se trata de la línea que alimenta las empresas básicas del Estado ¿Por qué engaña?”, señala el experto tras argumentar que el ministro manipuló la información mostrando dos torres de diferentes alturas. “Habría que ser bien atlético para elevar verticalmente un objeto pesado como el indicado en el video a esa altura para el caso de la torre de 400 kV, que no es la que realmente alimenta las empresas básicas”.
El experto consideró “preocupante” que los sabotajes ocurran en instalaciones “que supuestamente están militarizadas”. Para Aguilar, esto refleja la deficiente efectividad de la vigilancia.