DIARIO LA VERDAD (ZULIA)
José Aguilar / Ingeniero Eléctrico / jgasaguilar@hotmail.com / @SoyJoseAguilar
Nuestro Sistema Eléctrico Nacional (SEN) también está secuestrado; ya cumplió seis años seguidos sin información auditable, bajo el mayor despilfarro de tiempo
A 38 días para finalizar 2016, Venezuela está a la deriva; secuestrada por un estamento de poder a ambos lados del espectro político; incapaz de coherencia para encauzar con urgencia el nuevo rumbo para la República, que sigue bajo el yugo de la tiranía de Miraflores. Este secuestro político es el propulsor de los otros secuestros que oprimen la nación como: eléctrico, económico, salud y educación. Porque no es casualidad, esto ha sido un plan exitosamente orquestado en La Habana para empobrecer y esclavizar nuestra población que puja por libertad.
Esta incapacidad bota por la borda el enorme capital político otorgado de buena fe por el soberano; es la clase política la que promueve la antipolítica haciendo ver a los que se supone deben defendernos como otros miembros más de una funesta sociedad de cómplices cada vez más altanera, más cerrada en su mayoría, cuyo accionar revela una urgente necesidad de renovación y profesionalización para manejar por la vía de la Constitución, las múltiples aristas de nuestra compleja problemática.
Nuestro Sistema Eléctrico Nacional (SEN) también está secuestrado; ya cumplió seis años seguidos sin información auditable, bajo el mayor despilfarro de tiempo, para terminar echando hacia atrás más de una década energética y más de ocho mil empresas desaparecidas, lo que garantiza el secuestro económico; más miseria, más inflación y desempleo. En el corto plazo no tenemos un SEN capaz de propulsar el país si es que ocurriese un cambio político.
Hoy más que nunca con el pueblo en la calle, Venezuela debe ir hacia la libertad, abatiendo cualquier cogollo que nos azote. Es imposible pensar que los que nos hicieron llegar aquí, son los que nos van a sacar de esta tiranía, ya que demuestran ser parte del problema y no la solución.
El mundo mira y nos juzgará de no tomar en serio este reto, ya que no hay sustituto para la victoria. Nunca permitamos que nos secuestren el derecho a disentir y el chantaje a cambio de tolerar alcahueterías antiéticas de los que operan de espaldas al pueblo y solo se acuerdan de él en elecciones. ¡Manos a la obra que sí se puede!
http://www.laverdad.com/opinion/109784-secuestro-electrizante.html