CORREO DEL CARONÍ
PÚBLICO & CONFIDENCIAL/Damián Prat C.
Los responsables de la ruina de Guayana y de la masiva violación de los derechos de los trabajadores, en lugar de pedir perdón y asumir sus culpas, han desatado una campaña de hostigamiento, persecución y represión que ellos mismos bautizaron con el muy fascista mote de “limpieza”. Maduro y el cómodo ministro de Industrias, Ricardo Menéndez (ese que jamás se ocupa de Guayana y pretende “dirigir” desde sus aires acondicionados caraqueños) tienen retenidos los dineros aprobados para Guayan a y sus empresas.
En Bauxilum no han podido cobrar la quincena que debió pagarse dos días antes de las elecciones presidenciales. Son casi 10 días. ¿A Maduro y a Menéndez les importa algo el drama que viven esas miles de familias? Para nada. Están muy ocupados en apropiarse del poder cuestionado por la rebelión de votos del pueblo que no quieren sean recontados claramente.
En febrero, Menéndez anunció que Maduro y él habían aprobado más de 4 mil millones de bolívares para adquisición de insumos y pagos laborales para las cuatro empresas del aluminio. Según ellos, esa cifra permitiría “no tener preocupación para el funcionamiento hasta el mes de julio mientras las empresas comienzan a recuperar su capacidad de generar ingresos”. Eso dijeron porque buscaban votos. El dinero jamás llegó. A Bauxilum debieron ingresar 1.100 millones de bolívares y 80 millones de dólares para compras internacionales de insumos. Por eso no hay quincena. Más nunca se ocuparon de nada.
El domingo se cumplieron 8 meses exactos que el hoy fallecido presidente Chávez firmó el punto de cuenta para aportar 314 millones de dólares para inversiones en Sidor. ¿Se acuerdan? En aquella conflictiva “cadena” hecha desde Caruachi. No fue un anuncio. Fue un punto de cuenta aprobado y firmado. Le tocaba al entonces vicepresidente Maduro y al ministro Giordani hacer el trámite administrativo. Cuestión de días. Cuando Chávez se fue a Cuba habían pasado 3 meses y medio, pero Maduro y Giordani no habían resuelto nada. Luego, Maduro quedó a cargo de todo en el gobierno y nada. ¿Qué hizo con esos 314 millones de dólares de Sidor? ¿Dónde los tiene?
¡Con razón la mayoría de los trabajadores de Sidor, de Bauxilum y de toda Guayana votaron contra Maduro y por Capriles! Tanta ruina contra Guayana merecía un voto castigo y un voto por un cambio de futuro y progreso. El colmo es que ahora pretendan humillar y atropellar a los trabajadores por votar libremente a su conciencia. ¡Guayana seguirá luchando y defendiéndose de esta arremetida fascista!
TIP 1: La OIT (Organización Internacional de Trabajo) comenzó a levantar un expediente para documentar los abusos y atropellos contra los trabajadores venezolanos desatados desde la semana pasada. No es sólo el ministro de Vivienda (“no me importan en absoluto las normas laborales. Si no renuncian, los boto”), el presidente de CVG y otros. Ya hay casos en el sector educación y ayer en Comsigua, entre otros, donde se pretende obligar a los trabajadores a firmar un documento de apoyo a Maduro so pena de despidos y retaliaciones. ¿Los abusadores creen que el poder es eterno y que nunca tendrán que responder por sus actos fascistoides?
TIP 2: ¿Dónde están las termoeléctricas de Sidor? ¿Dónde los 800 MW que ellas debían producir para sumarlos al Sistema Eléctrico nacional? Los grandes jefes gubernamentales, culpables de ese y otros engaños, son los saboteadores en Corpoelec. Han desatado su campaña de brutal criminalización contra cientos de trabajadores, pero los culpables son ellos.
TIP 3: Leído en twitter: José Antonio España: “Lo único irreversible es la voluntad de los venezolanos que quieren saber la verdad del proceso electoral del 14-A”
TIP 4: “El secreto de Hitler era el odio”. Con ese título, en el diario El País de España se muestra un trabajo acerca del libro de Laurence Rees que investiga cómo fue que Hitler hipnotizó y fanatizó a millones y millones de alemanes en los años 30 del siglo pasado. “El poder del odio está infravalorado. Es más fácil unir a la gente alrededor del odio que en torno a cualquier creencia positiva”, dice el escritor. Inquietante verdad.
TIP 5: “La misión de Sidor es producir hierro y acero”. Lo dijo el sábado Nicolás Maduro en otra muestra triste de su nulo conocimiento de Venezuela.