DIARIO PANORAMA (ZULIA)
A consecuencia de la fuerte sequía que golpea el país —por el fenómeno climático de El Niño—, el embalse del Guri registra una cota de apenas 249 metros y ya se encuentra a 11 metros de llegar a su estado “crítico”, así lo informó ayer, el ministro para la Energía Eléctrica, general Luis Motta Domínguez, durante un recorrido por la principal central hidroeléctrica del país.
Motta Domínguez, al encabezar una inspección denominada Operación Agua Bendita —junto a personal de Corpoelec y de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb)— indicó que se realizó “una inmersión de 30 metros para verificar la distancia que hay desde la superficie a la toma de agua de la casa de máquinas número 1. Estando el Guri a 249 (metros sobre el nivel del mar) en una situación bastante crítica, podemos decir que la primera boca toma de agua se encuentra a 238 (…), es decir que nos quedan 11 metros de agua en el Guri desde la superficie”.
El titular de la cartera eléctrica puntualizó que el “fenómeno de El Niño” ha golpeado fuertemente el Guri desde su cota inicial (óptima) que es 271 (msnm) y que ha bajado 22 metros en los últimos meses. “Hacemos un esfuerzo sobrehumano con una excelente administración del embalse. El presidente (Maduro) nos dio la instrucción de incrementar en 1.000 megavatios la generación termoeléctrica”, recalcó.
Luego añadió: “Estamos haciendo un trabajo arduo (…) lograremos alargar la vida de Guri hasta el mes de mayo que vengan las lluvias. Todos los venezolanos debemos colaborar y hacer un uso racional de la energía”. Motta Domínguez denunció también que las continuas “acciones de sabotaje” han causado inestabilidad en el SEN (Sistema Eléctrico Nacional).
Actualmente, el nivel del embalse es similar a la cifra que presentó en marzo de 2010 y que llegó a los 249,1 metros. En esa oportunidad, el reservorio de agua registró un descenso diario de 12 y 13 centímetros, lo que fue calificado como “peligroso” para la estabilidad del sistema.
Durante dicha crisis, el embalse nunca tocó la marca de los 240 metros; en el mes de julio —y a raíz del inicio del período de precipitaciones— el nivel de agua subió hasta los 263 metros para finales de julio. Expertos aseguran que este año el período lluvioso podría comenzar para mayo y principios de junio, en el mejor de los casos.
José Aguilar, consultor internacional en Energía Eléctrica, indicó que el Guri presenta un “déficit de 3 mil 850 Mw”.
Afirmó que el complejo hidroeléctrico cuenta una potencia instalada de 10.350 Mw, pero que hoy tiene “cinco máquinas fuera de servicio: 2, 8, 9, 18 y 20. Eso le resta al Guri como 2.450 Mw, pero porque ya está produciendo por debajo de la cota 261 metros, eso hace que pierda otra cantidad de potencia, es decir, que tenemos una indisponibilidad de 3.850 Mw. El Guri ahorita no pasa de los 6.500 Mw (de generación)”.
Aguilar agregó que todavía con una potencia de “6.500 Mw la central no puede trabajar a ese ritmo porque no cuenta con la suficiente cantidad de agua. Se tiene que recortar ‘el trote’ al Guri porque sino la plantas de Caruachi y Macagua no van a poder producir”.
Como respuesta al problema, el experto sugirió que “se sumen más megavatios termoeléctricos o empiezan a racionar seriamente (el servicio eléctrico) y eso traerá para el país consecuencias muy graves. Es hora de tomar acciones concretas, responsable (…) no hay excusas porque a Venezuela se dirige una especie de oscurana”.
Ayer, el ministro Motta Domínguez descartó que los problemas en el sistema eléctrico sean consecuencia de la falta de mantenimiento y aseguró que se trata de matrices que persiguen generar malestar en la población. “Es completamente falso (…) acá se están haciendo todas las inversiones necesarias”, dijo.
Anunció que esta semana —sin precisar fecha— será inaugurada una Central Termoeléctrica en Barquisimeto para incorporar más “carga al sistema eléctrico nacional”.