OPINIÓN | ¿20 años no son nada?

El Pitazo

 


Llegó la Navidad a Venezuela y son muy pocas las razones para celebrar, entre ellas indudablemente tendremos el cariño que siempre nos hemos tenido, propio de la venezolanidad, pero son muchas las penurias que se han sobrevenido sobre el país.

Este 2018, al ver las pocas estadísticas dentro de la aberrante opacidad que tiene a Venezuela “sin números”, observamos que el Producto Interno Bruto, PIB de la nación se contrae en un -15 %, acumulando una contracción de – 44.3 % en los últimos cinco años. Eso indica que el desempeño del régimen en materia económica, ha hecho de Venezuela un estado fallido y un país invivible por inviable. Esto muestra un balance de destrucción económica equivalente a más de US$ 212 mil millones, de acuerdo al CEPAL.

Masacre económica de Venezuela de 2013 a 2018

La masacre económica, se ve y se siente en el Sistema Eléctrico Venezolano, SEV, el cual recordará el 2018 como el peor año en 130 años de historia eléctrica nacional. Pese a haber sido uno de los años más lluviosos históricamente y habernos dejado un Guri full, el país sufrió demoledores racionamientos para la economía y la calidad de vida de sus ciudadanos, especialmente en el Zulia, la segunda región de pujanza económica que sucumbe ante el modelo destructor que rige a Venezuela. Validando que con sequía o sin ella, el país sufrirá, porque el problema es el régimen.

Partiendo del conocimiento del comportamiento y funcionamiento de nuestro SEV, se nos presenta un cuadro desolador. Las cifras económicas y eléctricas están interrelacionadas, sólo separadas por pequeños factores de elasticidad numérica y nos  indican que el retroceso energético en el campo eléctrico de Venezuela del período 2013 a 2018 es cercano a 20 años. Sólo en un afamado tango argentino, se puede entonar que “20 años no son nada”, pero para Venezuela este cuadro representa un abismo de proporciones mundiales.

Destrucción de la demanda y consumo de energía eléctrica de Venezuela de 2013 a 2018

Lo que estos cuadros revelan es que el régimen que mal gobierna Venezuela retrocedió 20 años eléctricamente, después que más de US$105 mil millones homologados al año 1998, para terminar destruyendo la economía en más de US$212 mil millones y muchas de estas astronómicas sumas vertidas para el SEV, están salpicadas por inmorales escándalos de corrupción. En síntesis, pese a haber recibido en 1998 un SEV robusto con todos los recursos humanos y la planificación integral para los próximos 25 años, el régimen destruyó el futuro de Venezuela.

Bajo cualquier concepto esto es inexcusable e irrefutablemente y revela que el saboteo del SEV y de la infraestructura nacional es una política de estado.

Entre las graves macro conclusiones que estos cuadros nos revelan están:

  • Cualquier demanda por encima de los 11 mil 700 MW pondría al SEV en serios aprietos y causaría serios racionamientos en todo el país.
  • El parque térmico de generación con más de 5,5 millones de horas excedidas, tiene en el horizonte un significativo número de unidades que entraran su período crítico de excedencia. La estatal eléctrica demuestra que no solo es incapaz de ejecutar los mantenimientos requeridos en todo el SEV, sino que cuando los hace, los ejecuta mal y a costos prohibitivos.
  • El retorno de nuestros hijos en el exilio y la reactivación económica que Venezuela clama son inviables con el SEV en su estado actual y el régimen en el poder.
  • Sin electricidad, Venezuela no va a ninguna parte digna de nuestra Tierra.

Ya van 32 meses seguidos de hidrologías favorables y una contracción es posible en 2019, pero dados los niveles actuales de demanda, consumos eléctricos, más un Guri lleno, la posibilidad de amenaza, aún con la peor sequía que hemos tenido es baja. Los que hablen de fenómenos meteorológicos como alarmas para el SEV y el país, simplemente son colaboracionistas que le hacen el juego al régimen. Lo que sí son alarmantes son: la indisponibilidad de potencia en Guri y el marcado deterioro en los sistemas de transmisión, distribución y las plantas térmicas.

Les deseo a todos Felices Fiestas y lo mejor para el 2019. Les recuerdo que la electricidad es vital para el país. La era de “MW a cualquier costo”. no es factible. El único camino para Venezuela es la recuperación de los valores, la ética, la honradez extrema y el trabajo para crear verdadera riqueza. Siempre hemos tenido el potencial, pero debemos tener la disciplina y la constancia, solo así saldremos de la barbarie que nos destruye y oprime.

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