CORREO DEL CARONÍ
De once empresas estatizadas entre 2008 y 2011, sólo tres han recibido la indemnización del Gobierno.
La morosidad gubernamental ha afectado la operatividad, la estabilidad laboral, el pago de los pasivos y condenado al limbo jurídico a ocho de once empresas estatizadas entre 2008 y 2011.
Sólo Sidor, Cerámica Carabobo y Comsigua han sido indemnizadas. El resto, con más pena que gloria, sostiene reuniones esporádicas con el Estado venezolano para negociar los justiprecios de un frenesí expropiatorio.
De las 11 empresas expropiadas entre 2008 y 2010 en Guayana, sólo tres han logrado fijar el justiprecio y recibido el pago correspondiente por los activos en negociaciones con el Ejecutivo nacional.
Las dos únicas industrias con “suerte” han sido Sidor, antes en manos del consorcio ítalo-argentino Techint; el Complejo Siderúrgico Guayana (Comsigua), con socios mayoritariamente japoneses; y Cerámica Carabobo, ahora CVG Refractarios.
El resto de las empresas sigue envuelto en espinoso proceso de conversaciones, con pocos avances y más reveses, y con la incertidumbre de si finalmente recibirán el pago justo de sus activos, de acuerdo con el valor en libros contables.
En esta situación permanecen las briqueteras expropiadas en 2009: Orinoco Iron y Venprecar, filiales de la Siderúrgica Venezolana (Sivensa); Materiales Siderúrgicos (Matesi); la fábrica de tubos sin costura Tavsa, ahora Batalla de San Félix; Norpro de Venezuela, Friosa y Sidetur, también del grupo Sivensa, éstas tres últimas expropiadas en 2010.
La demora en la conclusión de la expropiación ha afectado a las industrias desde el punto de vista legal e, incluso, operativo, por lo que los trabajadores han exhortado al Ejecutivo Nacional a cesar el limbo jurídico.
Briqueteras en veremos
La negociación más lenta, hasta ahora, se ha dado en el caso de las briqueteras expropiadas en mayo de 2009.
Sivensa -propietaria de Orinoco Iron y Venprecar- recoge en su informe anual 2012, específicamente en el reporte de la firma contadora Espiñeira, Pacheco & Asociados del 13 de enero de 2013, que desde 2010 se han dado negociaciones con montos posibles de indemnización que en algunos casos no superan el valor en libros de las industrias.
“La indemnización por la ‘nacionalización’ de Venprecar y Orinoco Iron debe ser por un monto superior al valor en libros de la inversión, ya que estos valores están adecuadamente documentados con los avalúos realizados en junio de 2009, con el valor de uso de las empresas a esa misma fecha y sus posteriores revisiones, y considera que no existen circunstancias que indiquen que los cálculos pudieran variar de forma substancial”, señalan.
Al 30 de septiembre de 2012, los activos netos de Orinoco Iron y Venprecar, incluyendo las cuentas por cobrar netas, ascienden a Bs. 5.148 millones. La empresa desconoce el monto final de la indemnización, la moneda de pago y la oportunidad de pago por parte del Estado venezolano.
“No obstante los esfuerzos para proseguir las negociaciones con el sector oficial involucrado en el proceso de nacionalización de Venprecar y Orinoco Iron, no se ha podido, a la fecha, concretar con el Gobierno nacional un cronograma de trabajo con el fin de negociar el justiprecio de los activos objeto de nacionalización”.
Ocupada y sin indemnización
También del grupo Sivensa, fue expropiada en 2010 la Siderúrgica del Turbio S.A. (Sidetur), de acuerdo con el decreto publicado en la Gaceta Oficial Nº 39.544.
Los bienes muebles, inmuebles y bienhechurías, así como los fondos bancarios fueron transferidos en octubre de 2012 al estatal Complejo Siderúrgico Nacional, que ahora agrupa las dos acerías de palanquillas, cuatro trenes de laminación, una planta de mallas electrosoldadas y 15 centros de recolección y procesamiento de chatarra ferrosa de Sidetur.
Al 30 de septiembre de 2012, las propiedades, plantas y equipos; efectivo en moneda nacional; cuentas por cobrar comerciales e inventarios; anticipos recibidos de clientes; vacaciones, utilidades y otras acumulaciones y prestaciones por pagar de Sidetur alcanzaban a Bs. 1.736 millones.
No obstante, con una serie de avalúos posteriores, la gerencia de Sidetur considera que el valor en libros de los activos netos ocupados por la empresa estatal Complejo Siderúrgico Nacional S.A., reconocido en los estados financieros consolidados de Sivensa, es inferior a lo que debería ser su valor justo de indemnización por parte del Estado venezolano.
Además de la demora en la fijación del justiprecio, Sivensa ha señalado que ni la ocupación de los activos industriales ni la transferencia de los fondos se hicieron en ejecución de la medida de ocupación y operatividad temporal dictada por Indepabis, ni conforme a la Ley de Expropiación ni por orden judicial.
Friosa a la espera
Frigoríficos Ordaz S.A. fue expropiada en octubre de 2010, luego de una ocupación temporal de más de tres meses en la que se limitaron los despachos de productos a más de 5 mil clientes.
Tras más de dos años de ocupación, el justiprecio no ha sido definido. Robert Piña, representante de los trabajadores ante la junta administradora de la empresa, explicó que el proceso de fijación del justiprecio de la distribuidora de alimentos, “ha sido engorroso”. “Hay varios avalúos pero el antiguo dueño no aceptó el valor sugerido”.
En la Gaceta Oficial Nº 39.917 del 8 de mayo de 2012, emanada de la Presidencia de la República, se amplían los bienes expropiados de la compañía, incluyendo a la Farmacia La Fuente y “cualquier otro bien” propiedad del Complejo García Hermanos.
Matesi en el Ciadi
Matesi junto a la productora de tubos de acero sin costura, Tavsa, eran las dos empresas que quedaban del grupo argentino Techint en suelo venezolano, específicamente del consorcio Tenaris. Luego de ser expropiada en 2009, fue cambiado su nombre a Briquetera de Venezuela (Briqven).
Tenaris S.A. and Talta-Trading e Marketing Sociedade Unipessoal LDA introdujo ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi) del Banco Mundial en septiembre de 2011 la solicitud para iniciar un arbitraje, luego de la expropiación de la briquetera.
El gerente general de Briqven, Daniel Rodríguez, señaló que este 28 de enero tendrá un encuentro con los propietarios de la empresa en la sede de la Procuraduría General de la República. “El Gobierno sigue manteniendo la disposición de una negociación amistosa pero hay pasos que hay que seguir y que ameritan un tiempo”.
Transición “eterna” en Tavsa
La fábrica de tubos de acero sin costura, Tavsa, forma parte de las fábricas expropiadas en 2009. La industria fue adscrita a Pdvsa Industrial con el nombre de Batalla de San Félix.
El delegado sindical de la empresa, Jesús Zacarías, informó que las negociaciones entre el Ejecutivo y el consorcio argentino Tenaris se han retrasado y han demorado el traspaso de la fábrica de tubos a Sidor.
“Nos han dicho que Tavsa no puede ser una gerencia de Sidor porque sigue siendo de Tenaris”, dijo, al enfatizar que la transferencia a la siderúrgica estatal es primordial, en vista del abandono que ha significado ser tutelada por Pdvsa Industrial.
La industria tiene una capacidad de producción anual de 80.000 toneladas entre tubo de revestimiento, de línea y productos para otras aplicaciones.
Norpro en diálogo
Norpro de Venezuela, filial de Norpro con sede en Estados Unidos, en la que tiene participación la francesa Saint Gobain, fue expropiada en 2010.
El secretario general del Sindicato Profesional de Trabajadores de Abrasivos y Cerámicos, Conexos y Similares (Sinprotrac), William Vincent, señaló que la fijación del justiprecio está en trámites. “El Ministerio de Petróleo y Minería tiene conversaciones con la empresa Saint Gobain, se están haciendo los avalúos”, dijo.
El dirigente sindical explicó que la empresa privada no quería iniciar las negociaciones para definir el justiprecio, “el Gobierno en cambio siempre ha estado presto a negociaciones”.
La empresa produce proppants, un conglomerado de bauxita, almidón y agua utilizado por la industria petrolera para la extracción de gas y crudo.