DIARIO EL ARAGÜEÑO
En la sede del Distrito de Corpoelec Cagua, ubicado en la calle Froilán Correa de esa localidad, trabajadores de la estatal eléctrica repudiaron el asesinato de los hermanos José Gregorio y José Leonardo Villamizar, ocurrido la noche del miércoles en San Mateo y pidieron a las autoridades actuar, ante lo que calificaron como “el desplome de la empresa más importante del país”.
Juan González, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Corpoelec Aragua, en compañía de un importante grupo, manifestó que además de repudiar el hecho de sangre quieren dejarle claro a la ciudadanía que el personal de Corpoelec también es pueblo, y que al igual del resto de la gente también sufren las penurias causadas por los constantes apagones registrados en todo el país, de los cuales aseguró no tienen culpa.
González subrayó que la estatal Corpoelec se ha mantenido en pie gracias al compromiso de la masa laboral, pues con los pocos insumos que tienen van y reparan las fallas registradas hasta donde les sea posible actuar, pues hay irregularidades que se les escapan de las manos, según él porque no tienen los implementos necesarios para responder a la necesidad global, que tienen la mayoría de las comunidades.
La ocasión fue aprovechada por los denunciantes para hacerle un llamado al gobernador Rafael Isea, a las autoridades de la Secretaría de Seguridad y Prevención Ciudadana y al alto mando en materia eléctrica, a actuar ante las constantes arremetidas que sufren los trabajadores de Corpoelec, quienes hace menos de quince días fueron víctimas de agresiones por parte de un turba que los interceptó cuando reparaban una avería, en el municipio Linares Alcántara.
“Cuando pedimos apoyo policial, llegan los funcionarios y en menos de diez minutos se van, sin importarles dejar las cuadrillas a la deriva. Nos mantenemos en luto activo, pero atendiendo los circuitos y reclamos a pesar que, por ejemplo, en este momento, el sistema se encuentra caído y las oficinas sin operar por ese inconveniente”, refirió.
Con respecto a los hechos, detallaron que la información que tienen es que luego de reparar las averías, los hermanos Villamizar se pararon a comer perros calientes en un lugar cercano cuando fueron interceptados por sus homicidas, quienes dispararon a diestra y siniestra.
Realidad del Distrito Cagua
Según González, en Cagua hay 70 trabajadores que se encargan de atender las eventualidades registradas en esa localidad, así como en Santa Cruz y los municipios Mariño y Bolívar, con las dos unidades de las que disponen.
Según los denunciantes, además de gasolina para las pocas y deterioradas unidades con las que cuentan, en ocasiones se ven obligados a sacar dinero de sus bolsillos para costear la adquisición de implementos como conectores y fusibles para reparar las fallas y responder a la petición de quienes habitan en sectores azotados por los constantes apagones.
Ante esta situación, esperan reunirse en las próximas horas con el alto mando eléctrico para tomar acciones conjuntas y llegar a acuerdos dirigidos a resguardar la vida de las cuadrillas.
“Le hacemos un llamado al pueblo para que no nos agreda, y para que entienda que nosotros salimos a trabajar con lo poco que tenemos, sabiendo que no somos culpables de las irregularidades y fallas que existen actualmente”.