CORREO DEL CARONÍ
PÚBLICO & CONFIDENCIAL/Damián Prat C.
“A las dos de la tarde del viernes vino una comisión de Pdvsa y nos dijo que cerráramos la empresa, que desalojáramos por la acumulación de gases producto de una fuga”, cuenta el trabajador de la empresa Puramín Gilberto Bravo, al periodista Juan José Faría del diario zuliano La Verdad y a su reportera gráfica Marifé Cuauro. Bravo ahora está desempleado junto a otros 200 trabajadores, porque la empresa fue arrasada por la explosión. Desapareció. Él sobrevivió y puede contar muchas cosas, pero no así su amigo y compañero de trabajo Rigoberto Colina quien entró a trabajar en el turno de las 11 de noche y fue quien dejó otro testimonio imperecedero que desmiente tanto al ministro Ramírez y al gerente Luongo como a Chávez: en su BB colocó “hay gases al 24%. Nos estamos muriendo”. Allí está la foto de la pantalla de su teléfono. Él podía medir la intensidad de la acumulación de gas porque la cuadrilla de Pdvsa de la tarde les había dejado un aparatico de medición. Dos horas después estalló el infierno.
¿Por qué si 11 horas antes Pdvsa sabía del grave peligro no tomó medidas drásticas como desalojar a todos, incluyendo al puesto de la GN e incluso a los vecinos más cercanos? ¿Por qué no se tomaron las medidas del plan de contingencia que debe existir porque la Pdvsa de calidad los tenía? Eso es parte de lo que habría que investigar si hubiera una investigación real y no la pantomima de poner al frente de la indagación a los propios responsables de la (mala) marcha de la empresa. En cualquier país donde la complicidad en el alto gobierno no sea la norma, Ramírez, Luongo, el “primo” Narciso Chávez, Del Pino y otros estarían separados de sus cargos para facilitar las investigaciones. Pero ésta es la “revolución” de las complicidades. Igual que en PudreVal o en la Mafia de las Cabillas.
Observen el detalle. A las 2:00 pm del viernes los mandan a desalojar. A las 11:00 de la noche otro grupo entra a trabajar y nadie se los impide. ¿Un grupo de trabajadores de Pdvsa cumplió con su deber pero la empresa como un todo fue negligente? Asunto a investigar. ¿Le avisaron a los integrantes del Destacamento 44 de la GN? ¿Cuántas vidas habrían podido salvarse? ¿Le avisaron a los vecinos en peligro? Esto último sabemos que no, porque ningún vecino ha dicho que les hayan advertido nada. Muchos aseguran haber sentido el olor a gas muy fuerte, diferente a los olores “normales” en la zona.
Recomiendo leer ese excelente reportaje en La Verdad, edición de ayer martes. Porque además están otros testimonios importantes de familiares de víctimas sobrevivientes, incluyendo al director de Defensa Civil en el municipio que salvó a su suegro herido y otro trabajador rescatándolos de entre los escombros. También en El Mundo Economía y Negocios recogieron testimonios similares con una pequeña diferencia, que los trabajadores que les brindan el testimonio ubican la orden de desalojo a la 1:00 de la tarde y no a las 2:00 pm. Para todo efecto es igual. Un dato agregado que aportan es que la empresa Puramín, envasadora de aceites industriales, con 38 años ubicada a la vera de Pdvsa Amuay, fue propiedad del ex ministro de Petróleo de este gobierno y ex embajador Álvaro Silva Calderón. Está el relato de la novia del fallecido Colina. Y otro dato es el testimonio de otros trabajadores y vecinos acerca de la fuga de gas intermitente durante al menos una semana.
¿Van a seguir Ramírez y Chávez negando todo? ¿Va a seguir Ramírez diciendo que es “infame” publicar esos testimonios de gente afectada? A testimonios parecidos se refería la periodista de RCN a la que Chávez trató de apabullar diciendo que eran “rumores sin fundamento” y “campañas de la derecha”. ¿Van a seguir tratando de tapar la verdad? ¿Qué pretenden ocultar?
En el cínico canal 8 y en el gobierno han tratado de convertir -con fines miserablemente electoreros- la tragedia en un show (“la función debe continuar”, dijo Chávez en una de las cosas más desafortunadas que haya dicho) de triunfo “porque se apagó el incendio y el comandante va a repartir 50 casas”. Y aplausos a los jerarcas rojos de Pdvsa y “gracias al comandante”, cuando la realidad es que esa tragedia nunca debió ocurrir si los programas de mantenimiento se cumplieran, si las válvulas dañadas se remplazaran, si el personal fuese entrenado como era antes para garantizar la seguridad; si en lugar de perseguir y negar al sindicato petrolero de Falcón, le hubieran hecho caso en los informes y reclamos presentados. Si los jerarcas rojos se preocuparan por la seguridad industrial en lugar de la politiquería electorera. Si ante la falla grave se hubiera desalojado a las personas en peligro y se hubieran tomado las medidas del caso.
Ayer, en Público & Confidencial radio, tuvimos, vía teléfono, a Iván Freites, secretario general del sindicato petrolero de Falcón, un caso parecido al de Rubén González, porque el gobierno antiobrero de “la revolución” se empeñó en usar el peso del Estado para derrotarlo e imponer su grupito patronal rojito, pero los trabajadores tuvieron dignidad. Freites y su equipo ganó las elecciones con 11 de 12 puestos. Pero Ramírez prohibió que lo dejaran entrar a Amuay. Le quitaban los celulares a los trabajadores a ver quienes le pasaban datos. Desconocen la voluntad popular. Ahora lo amenazan para tratar de que se calle. Solo que el hombre es recio. Nos toca a los venezolanos rescatar Pdvsa y ayudar a sus trabajadores el 7 de octubre. Para garantizar, entre otras cosas, que la seguridad industrial y el mantenimiento sean una prioridad en Pdvsa, en Guayana y en todas partes.
TIP 1: Hoy Capriles en Guayana. Primero en Upata y El Palmar, pueblo por pueblo. Y en la tarde en un encuentro con los trabajadores. Habrá diálogo. Un muy calificado grupo de dirigentes sindicales hablará y le entregará un documento con propuestas de qué hacer para recuperar Guayana y proyectarla. Se espera con interés escuchar cuáles son las ideas y compromisos de quien con toda seguridad será el nuevo Presidente de todos los venezolanos. Le doy un dato: estarán presentes, activos y visibles, varios muy calificados líderes sindicales que estuvieron apoyando al actual gobierno pero que ya están decepcionados y hartos del engaño. Quieren cambio y progreso para los trabajadores. Hay un Camino. Está aclarando la mañana en Venezuela.
TIP 2: Nuevas advertencias y presiones contra Público & Confidencial radio. Que nos callemos, que no hagamos denuncias, que “dejemos el fastidio de apoyar los reclamos de los trabajadores”. Incluso un twittero con seudónimo (siempre la cobardía por delante) nos “advierte” de no dar cabida a denuncias contra un alto funcionario “porque es anunciante de donde trabajas”. Le replico que nadie me pone bozal de arepa, y me responde: “después no digas que te quedaste sin trabajo por “culpaechiabe”. Tomada nota y hecha pública. Porsia.